Los viajes de negocios siguen siendo un motor de crecimiento esencial para las empresas, en especial por el presente económico cambiante en el que les toca navegar. De hecho, un 88 % de quienes deciden los viajes en las compañías (decisores) afirma que estas travesías son críticas para guiar el crecimiento de la organización, según un estudio de Mastercard.
En esa misma línea, se piensa que la reducción de los viajes de negocios tendría un impacto negativo en la empresa; un 43 % de decisores señala que esto disminuiría las ganancias en más de un 10 % durante los siguientes tres años e incrementaría la rotación de empleados en el mismo porcentaje y periodo.
Así, mantener el ritmo de los viajes de negocios no es solo clave para el crecimiento de las empresas, sino también para evitar la reducción de ingresos y pérdida de talento humano. En este objetivo es fundamental recordar que el mundo laboral cambió desde la pandemia y que existen nuevos factores que influyen e impactan el ecosistema de viajes laborales.
Trabajo remoto
El trabajo remoto ha acelerado la demanda global de los viajes de negocios; de hecho, más del 90 % de decisores cree que propiciará un aumento significativo en el número de viajes por trabajo en sus empresas durante los próximos diez años. La premisa coincide con las previsiones del sector, que estiman que el volumen de las travesías de negocios superará los niveles prepandémicos para el 2026.
Por supuesto, las buenas noticias vienen acompañadas de nuevos desafíos; por ejemplo, el 86 % de decisores piensa que el trabajo remoto ha hecho que manejar los gastos de viajes de negocios sea más retador. Esto dado que ahora tienen que administrar las necesidades de colaboradores de oficina, híbridos y a distancia.
Entre los desafíos que han descubierto destacan el entregar información sobre políticas de gasto de viaje a tiempo y de forma efectiva (65 %), garantizar el cumplimiento de la gestión de gastos de viaje (64 %) y administrar las necesidades de una fuerza laboral heterogénea (58 %).
Los decisores señalan, además, que el trabajo remoto ha impactado en las previsiones y el gasto; de hecho, el 61 % afirma que los colaboradores híbridos o a distancia hacen que sea más desafiante el pronosticar y presupuestar los gastos para viajes de negocios.
Como resultado de lo anterior, los decisores tienen una mayor necesidad por herramientas más flexibles de gestión de gasto y pagos (89 %) y otras más dinámicas para la optimización de gastos de viaje (88 %).
Asimismo, encuentran clave el papel de las tarjetas de crédito y débito, en especial las que son de tipo virtual. Tal es la demanda que un 92 % de decisores pretende brindarlas a sus colaboradores cuando viajen; de hecho, al preguntárseles acerca de las iniciativas que ven más importantes para su organización, señalan que es una prioridad ofrecer estas tarjetas.
Además, el 48 % indica que la solución será muy común en la mayoría de empresas en los próximos cinco años y un 42 % asegura que será un diferenciador para las organizaciones innovadoras, lo mismo que para los proveedores de servicios que quieran atraer a viajeros de negocios en los siguientes años.
Estos nuevos retos han hecho que se reevalúe el panorama de los viajes de negocios y un 87 % de decisores está seguro, hoy, que el sector está en un punto de inflexión y que tiene la oportunidad de dar un paso adelante.
Fuente: Navigating global business travel – Mastercard (Agosto, 2023).